Una Inesperada Aventura: Guía de surf a Panamá
En Panamá, el surf es mucho más que un deporte: es una forma de conectar con la naturaleza,
con la comunidad y con uno mismo. Entre olas perfectas y playas intactas, el país se consolida
como un destino de surf de clase mundial. Con más de 2,900 kilómetros de costa bañados por
el Pacífico y el Caribe, el país se posiciona como un paraíso de surf durante todo el año,
combinando naturaleza intacta, autenticidad cultural e infraestructura moderna.
A diferencia de otros destinos más concurridos, Panamá conserva un encanto no masificado,
con playas que se han transformado en surf towns llenas de vida, donde viajeros y locales se
mezclan en un mosaico cultural con alma de surf. Ya sea que busques tu primer swell o que
estés persiguiendo la ola perfecta, este es un lugar donde dos océanos se encuentran y cada
ola cuenta una historia. Gracias a su tamaño compacto, es posible vivir la experiencia de
ambos mares en un solo viaje: desde las olas poderosas del Pacífico hasta los arrecifes y
aguas turquesa del Caribe.
Dónde surfear: destinos de clase mundial dentro de Panamá
● Bocas del Toro (Costa del Caribe): aventuras de isla en isla, con olas para todos
los niveles
En el archipiélago de Bocas del Toro, el surf convive con el ritmo caribeño y la calidez
de su gente. Este paraíso natural combina islas vibrantes, playas vírgenes y una
comunidad multicultural donde cada jornada se vive al compás del mar. Desde las
rompientes legendarias de Playa Paunch, Dumpers y Playa Bluff en Isla Colón, hasta
las izquierdas perfectas de Punta Carenero y las potentes olas de Silverbacks en Isla
Bastimentos, Bocas ofrece opciones para todos los niveles. Más allá del surf, Cayo
Zapatilla, reconocida entre las 25 mejores playas del mundo, invita a descubrir un
paraíso natural de arena blanca y aguas cristalinas, mientras que Bocas Town vibra con
gastronomía internacional, vida nocturna y un espíritu bohemio. Con opciones de
hospedaje que van desde hostales sobre el agua hasta resorts de lujo, el archipiélago
de Bocas del Toro combina aventura, bienestar y comunidad en un solo destino.

● Playa Venao (Provincia de Los Santos): energía, competencia y surf todo el año
Playa Venao es uno de los destinos más emblemáticos del surf panameño, reconocida
mundialmente por recibir competiciones como los ISA World Surfing Games y el
Campeonato Panamericano de Surf. Su forma de herradura y su fondo arenoso ofrecen
olas consistentes todo el año, con rompientes de derecha e izquierda ideales para
surfistas de todos los niveles. Más allá de su legado competitivo, Venao se ha
convertido en un punto de encuentro para viajeros, nómadas digitales y surfistas de
élite, que disfrutan de su ambiente social, sus restaurantes internacionales, sus
alojamientos boutique frente al mar.
● Riviera Pacífica: olas fáciles y recuerdos imborrables
A solo dos horas de la Ciudad de Panamá, la Riviera Pacífica es perfecta para quienes
buscan olas accesibles y buen ambiente. Playa Serena ofrece olas largas y
consistentes, ideales para perfeccionar técnica; Playa Teta atrae a surfistas intermedios
y avanzados con sus tres puntos de rompiente, mientras que Chame y Playa Malibú
ofrecen condiciones limpias y sin multitudes. El Palmar, favorito local, cuenta con tres
puntos emblemáticos —Frente Palmar, Punta Palmar y Hawaiisito— ideales para todos
los niveles. Las playas de Bijao, Playa Blanca y Buenaventura completan el recorrido
con paisajes de arena dorada, y todo lo necesario para una escapada de surf, sol y
descanso.

● Santa Catalina (Costa Pacífica de Veraguas): el titán del surf panameño
En la costa pacífica de Veraguas, Santa Catalina es sinónimo de olas legendarias y
naturaleza indómita. Aquí se encuentran La Punta, un point break icónico con olas de
hasta 9 metros, y Punta Roca o Punta Brava, con desafíos que seducen a surfistas
avanzados. Quienes se inician pueden hacerlo en Playa Estero, de fondo arenoso y
olas amables, o aventurarse en lancha hacia Isla Cébaco. Además, Santa Catalina es la
puerta de entrada al Parque Nacional Coiba, declarado Patrimonio Mundial por la
UNESCO, un santuario marino que alberga el arrecife de coral más grande del Pacífico
Oriental Tropical. Este entorno convierte a Santa Catalina en un destino de ensueño,
donde las olas y la biodiversidad se encuentran en equilibrio perfecto.

● Morro Negrito y Punta Burica (Provincia de Chiriquí): suave, emocionante y todo
por descubrir
Más al oeste, la costa de Chiriquí combina surf, naturaleza y cultura en un entorno aún
por descubrir. Morro Negrito, un pequeño destino isleño ideal para campamentos de
surf, ofrece olas que van desde rápidas hasta suaves y accesibles. En tierra firme,
Punta Burica es el punto favorito de los surfistas experimentados, mientras que Los
Olivos ofrece olas más tranquilas para todos los niveles. Chiriquí también es hogar del
café más valorado del mundo, el Geisha panameño. Aquí, los viajeros pueden caminar
por fincas, conocer a los productores y degustar el café más premiado del planeta.
Además, el Parque Nacional Marino del Golfo de Chiriquí ofrece experiencias durante
todo el año de buceo, pesca y exploración marina, con delfines, mantarrayas y una vida
submarina fascinante.

