Chamberí, vida de barrio y glamur

Chamberí, vida de barrio y glamur

Dicen que Chamberí es la zona más castiza de Madrid. Ciertamente lo es porque conserva como pocas la esencia de esta ciudad en la que aún se puede hacer vida de barrio. También tiene fama de mantener un aire señorial herencia de su pasado aristocrático. Y es que Chamberí es un distrito ecléctico que reúne todo lo que un madrileño o visitante puede anhelar. Por eso se ha convertido en uno de los más deseados. ¿Quieres saber por qué? 

Por el encanto de sus calles y plazas

Si te animas a descubrir Chamberí, es mejor que lo hagas por tramos y a tu ritmo. Es un distrito grande y diverso formado por seis barrios: Trafalgar, Arapiles, Gaztambide, Vallehermoso, Ríos Rosas y Almagro. Cada uno tiene su singularidad, que merece la pena conocer.

Lo ideal es caminar por sus calles, observando la arquitectura señorial de sus edificios. Muchos de ellos fueron residencia de gran parte de la aristocracia en los siglos XIX y XX. Y toma nota de que algunas de sus calles como Zurbano concentran singulares palacetes y ha sido considera por medios como el New York Times como “una de las mejores de Europa”. 

En tu camino, disfrutarás de encantadoras plazas como la de Olavide en el barrio de Trafalgar. Este acogedor espacio, ajardinado y repleto de terrazas, es uno de los más apetecibles de Madrid para deleitarse con la gastronomía más variada en modo de tapeo.  Y, en epicentro del distrito, en la confluencia de la calle Santa Engracia y el Paseo de Eduardo Dato, te espera el rincón más castizo: la Plaza de Chamberí.

Atención también a los oasis arbolados como el Parque de Santander con más de 55.000 metros cuadrados de zonas verdes y pistas para descargar adrenalina con todo tipo de deportes como baloncesto, voleibol y hockey. Si eres aficionado al running, ponte en forma practicándolo en el circuito circular del que dispone. 

Por sus museos casi secretos

Chamberí es, además, un paraíso para las experiencias culturales. Junto a las grandes pinacotecas del Paseo del Arte, Madrid te ofrece otros fascinantes museos menos conocidos. En Chamberí se ubica una de las Casas museo más especiales: el Museo Sorolla (cerrado temporalmente por obras de rehabilitación). Se trata de una de las casas de artistas más completas de Europa y, además de embelesarte con la obra del pintor valenciano, podrás admirar extraordinarias esculturas, muebles y cerámicas. No te pierdas su jardín, uno de los más coquetos y especiales de Madrid.

Si sientes curiosidad por todo lo relacionado con los minerales, rocas o fósiles, pon rumbo al Museo Geominero. El edificio, situado en la calle Ríos Rosas, fue declarado Bien de Interés Cultural y es uno de los más singulares al tratarse de un ejemplo extraordinario de museo científico de principios de siglo de XX. Te sorprenderá su salón central repleto de vitrinas de madera tallada y cubierto por una gran cristalera cenital que cuelga de una estructura de hierro forjado y plomo.

Y, si quieres descubrir uno de los museos más originales, dirígete a la Plaza de Chamberí. Allí se encuentra Andén Cero – estación de Chamberí una antigua estación de metro, cerrada en 1969, y que se ha rehabilitado para convertirla en un centro de interpretación del Metro de Madrid. Te transportarás al Madrid de 1919, año en el que se inauguró la primera línea del metropolitano que cruzaba el centro de la ciudad desde Cuatro Caminos hasta Gran Vía.

Por la creatividad de sus galerías de arte

La actividad cultural se ve también representada por las galerías de arte, diseminadas por todo el distrito. En ellas podrás admirar la obra de creadores nacionales e internacionales y asistir a encuentros y conferencias que te pondrán al día de lo que se cuece en el mundo del arte más de vanguardia. Es el caso de la Galería Freijo, en la calle Zurbano, que expone obras de artistas nacionales y latinoamericanos. 

Los apasionados a la fotografía encontrarán su lugar perfecto en galerías como la del fotógrafo Javier Aranburu, en el barrio de Gaztambide. En ella se puede conocer y adquirir la obra de este artista y disfrutar de una exposición permanente de fotografías sobre Madrid. 

Otras de las galerías imprescindibles de Chamberí son Bat Alberto Cornejo; NF Nieves Fernández; Daniel Cuevas; Cayón y carlier | gebauer.

Por sus espacios singulares

El recorrido tiene parada obligatoria en espacios singulares que parecen sacados de una película como el Frontón Beti Jai, construido a finales del siglo XIX para albergar los encuentros de esta especialidad deportiva de gran popularidad en la época. Fue diseñado por Joaquín Rucoba y declarado Monumento Nacional y Bien de Interés Cultural.

Otra joya arquitectónica es la Casa de las Flores diseñada en 1931 por Secundino Zuazo y declarada Monumento Nacional en 1981. Está considerada como la construcción más importante del moderno ensanche madrileño y en ella vivió el poeta Pablo Neruda cuando llegó a Madrid en 1934.  

Y no te pierdas la Sala Canal de Isabel II, ubicada en un antiguo depósito de agua elevado, que data de principios del siglo XX, y que ha sido restaurado y acondicionado como sala de exposiciones. 

Por su oferta de ocio

Chamberí es uno de los distritos que concentra mayor oferta de ocio, en especial la dedicada al mundo del teatro y el cine. En la calle Cea Bermúdez, te espera uno de los nuevos templos del arte escénico en Madrid: los Teatros del Canal. Te llamará la atención su espectacular edificio de 35 200 metros cuadrados, obra de Juan Navarro Baldeweg y ganador del Premio Nacional de Arquitectura. Sus vanguardistas salas están equipadas con las últimas novedades tecnológicas y acogen textos clásicos y obras actuales, además de conciertos y espectáculos de danza, flamenco, zarzuela, ópera, circo o cabaret.

Por sus comercios de ayer y de hoy

A la hora de las compras, la zona no defrauda y se posiciona como una de las de mayor oferta. El área más frecuentada es la calle Fuencarral, entre las glorietas de Bilbao y Quevedo, en la que podrás encontrar los establecimientos de las principales cadenas de ropa y complementos, muchas de ellas de las principales firmas españolas, y todo tipo de propuestas para estar a la última. 

Lo  más divertido es perderse por los barrios y calles del distrito y brujulear entre los establecimientos de barrio de toda la vida: herbolarios, mercerías, tiendas de libros, manualidades, juegos de mesa… Tiendas con más de treinta años de actividad como el Herbolarío Vallehermoso o la librería Ábaco se entremezclan con espacios recién llegados como Supernormal o El Colmado del Tomate, ideales para quienes buscan productos de proximidad, Hecho, enfocada en el diseño sostenible, y coquetas floristerías como Botanyco.

Por sus bares y tabernas de toda la vida

Uno de los mayores encantos son los bares y tabernas de toda la vida. Además de la Plaza de Olavide, hay muchas otras áreas como la glorieta de Quevedo, las calles de San Bernardo y Santa Engracia o las zonas de Vallehermoso y Gaztambide donde se concentran terrazas y tabernas, como la Bodega de la Ardosa, en la que podrás disfrutar del ritual del aperitivo, tan genuino de Madrid.  

Si hablamos de Chamberí y experiencias gastro, no puede faltar una de las calles más de moda: Ponzano.  En ella se dan cita desde locales clásicos como El Doble en el que las cañas acompañadas de apetecibles tapas son las protagonistas hasta la alta cocina como el restaurante El Invernadero del chef madrileño Rodrigo de la Calle, que además de una Estrella Michelin ha sido galardonado con una Estrella Verde. 

Por su alta cocina

La fiesta gastronómica tiene también parada en otros establecimientos de alta cocina. La zona aglutina una gran parte de los restaurantes Estrella Michelin como es el caso de Saddle, capitaneado Adolfo Santos y con una carta basada en un producto de temporada.

En la zona también se ubica Clos Madrid del sumiller asturiano Marcos Granda, que cuenta con una estrella Michelin; Smoked Room, del chef malagueño Dani García, reconocido con dos estrellas Michelin y un Sol Repsol; Coque con dos estrellas Michelin y a cuyo frente se encuentran los hermanos Sandoval; La Tasquería y Quimbaya del chef colombiano Edwin Rodríguez.

Por sus castizos mercados

La vida de barrio que aún se respira está muy presente en sus mercados municipales como el de Guzmán el Bueno, el de Vallehermoso o el de Chamberí. En ellos es posible no solo adquirir los deliciosos productos de temporada, sino también degustar auténticos platos de la gastronomía madrileña e internacional. Si eres fan del tapeo selecto, no te pierdas La Chispería, la zona más gastronómica del mercado de Chamberí.

Museos secretos; bares de toda la vida; cocina de autor; mercados gastronómicos; edificios singulares… ¡Chamberí, un distrito que conserva la vida de barrio y todo el glamur de su pasado más chic y señorial!

vivirviajando