Los mercados de Quito, escaparate de la gastronomía ecuatoriana en Londres

Los mercados de Quito, escaparate de la gastronomía ecuatoriana en Londres

Empanadas de morocho, canelazo y espumilla fueron algunas de las delicias ecuatorianas que pudieron
degustar los visitantes de la prestigiosa feria de destinos gastronómicos National Geographic Traveller
Food Festival el pasado fin de semana en Londres.

Blanca Manobanda, del mercado quiteño San Francisco, y Omar Ortiz, del de Santa Clara, deleitaron al
público el domingo con sus especialidades en el expositor de Ecuador, mientras que el sábado el chef
ecuatoriano afincado en la capital británica David Reyes impartió una clase de fritada e higos con queso.

Manobanda -tercera generación de un puesto de dulces como la espumilla- y Ortiz -sucesor de su padre
en la elaboración artesanal de la empanada de morocho- ganaron en abril el concurso ‘El sabor de Quito a Londres’, por lo que se convirtieron en embajadores de los mercados de la capital ecuatoriana ante el
público británico.

En el estand de Ecuador, uno de los más concurridos del evento organizado por la revista National
Geographic Traveller Food, el gerente técnico de Quito Turismo, Óscar López, explicó la importancia de la
gastronomía como reclamo turístico.

“Al estar en el centro del mundo por la línea ecuatorial y además atravesados por las montañas de los
Andes, tenemos una gran variedad de microclimas, hay sol durante todos los días del año, lo cual nos da
una infinidad de ingredientes para poder hacer muchísimos platos típicos que comemos todos los días
muy deliciosos.

Según López, los 53 mercados de Quito, ocho de ellos con un mayor potencial turístico, “son lo más
importante” para poder disfrutar de esa experiencia. “Cuando se visita un sitio, siempre hay que conocer
el mercado para saber qué come la gente local”, apuntó.

Una aventura sensorial

Frutas frescas, jugos, granos, papas, carne de cerdo que se come en las fritadas o el hornado y un
espectacular chocolate son algunos de los productos hallados en la capital, donde la escena
gastronómica está en alza con una oferta de establecimientos tradicionales y de vanguardia.

Santiago Granda, el subsecretario de Promoción del ministerio de Turismo del Gobierno de Ecuador,
observó que “la gastronomía es una parte muy importante de la cadena de valor del turismo como
industria, pero también es un atractivo sensorial”.

Cuando uno viaja, quiere que la experiencia sea tan auténtica, real e inmersiva como sea posible, y
Ecuador todavía puede brindar eso, esa gastronomía única, deliciosa”, declaró.

Con unos 750.000 turistas al año actualmente, Ecuador trabaja para regresar a los niveles previos a la
pandemia, con el objetivo de recibir unos 2 millones de visitantes para 2025.

Granda reconoció que existen desafíos exógenos como la competencia de Asia e internos, como la
percepción en el extranjero de que hay volatilidad política en su país. En su opinión, esto no debe ser un
impedimento para los viajes, pues “está muy focalizada y no afecta a los circuitos turísticos”.

El subsecretario recordó que el ministerio de Turismo de Ecuador prioriza en todo caso “un turismo
sostenible, que involucre a las comunidades, que realce a toda la cadena de valor, que no sea algo
masivo y que tenga un impacto ambiental y cultural lo más bajo posible”.

El principal mercado emisor es Estados Unidos, seguido de países europeos como España, Francia,
Alemania, Países Bajos y el Reino Unido.

El amor como ingrediente

Antes de elaborar su famosa espumilla para un público expectante, Manobanda contó la ilusión que le
hizo ser elegida para representar a Ecuador, a Quito y al mercado de San Francisco, donde atiende a su
clientela “con mucho cariño y amor, cada día de la semana”.

“Es una emoción participar (en la feria), dar a conocer nuestras raíces, nuestra cultura, nuestra
gastronomía, que es fenomenal porque Ecuador es único y somos millonarios de pertenecer a este país, y
debemos sentirnos orgullosos”, afirmó.

Ortiz, por su parte, destacó que la gastronomía “es uno de los principales aspectos que la gente puede
conocer”, en particular también en su mercado de Santa Clara.

“Los visitantes pueden deleitarse de sabores exóticos, de comida tradicional, pero más que todo del
amor, de la cultura de nuestra gente, pues toda la comida que se prepara en Ecuador, en Santa Clara, o
como yo siempre digo, en mis empanadas de morocho, aparte del gran sabor que tienen, llevan amor”,
manifestó.

“Eso es lo que compone una gran gastronomía. Si no amas lo que te gusta hacer, entonces no va a
quedarte bien”, agregó.

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