Arganzuela, o el arte de reinventarse
Un antiguo matadero del que surge una pequeña ciudad dedicada a la cultura; una
autopista soterrada sobre la que se levanta un parque lineal; una estación de tren del
siglo XIX congelada en el tiempo y ahora museo; una fábrica en desuso de la que
emerge una biblioteca; un garaje consagrado al arte urbano… Así es Arganzuela, una
zona de pasado industrial en continua reinvención para ser el paradigma del Madrid
más sostenible y dinámico. ¡Recorrerla es todo un arte!
Matadero Madrid, la ciudad de la cultura
Imagínate una ciudad en la que en pocos metros pudieras tener para tu disfrute un
cine, salas de teatro y danza y todo tipo de exposiciones. Sin duda el paraíso de
cualquier amante de la cultura, ¿verdad? Pues te contamos que ese lugar existe y que
se llama Matadero Madrid. Su nombre deriva del uso que tenía cuando se construyó a
principios del siglo XX a orillas del río Manzanares para albergar el antiguo Matadero.
Tras su reconversión para uso cultural, representa todo un referente de la
transformación urbana de la ciudad, que apuesta por recuperar edificios en desuso
para dedicarlos a actividades de ocio y cultura. Los pabellones de estilo neomudéjar
son ahora una cineteca, una central de diseño, una nave para las artes escénicas, un
centro de experiencias inmersivas, una Casa del Lector y un Centro de Danza, pionero
en España.
También los planes al aire libre tienen cabida con toda una calle y una plaza para
disfrutar, especialmente los fines de semana, de talleres, actuaciones, performances,
mercadillos y hasta verbenas populares en los meses estivales.
A estas alturas, te estás preguntando si puedes encontrar algún espacio para tu
momento gastro. La respuesta la tienes en La Cantina, situada en la que fuera la
antigua sala de calderas y con propuestas ecológicas y un punto gourmet.
Y un poco más allá, en el denominado barrio de Los Metales, conocido así por el
nombre de sus calles: Plomo, Antracita, Hierro…, encontrarás una de las zonas con más
proyección gastronómica de Madrid, plagada de restaurantes clásicos y de vanguardia.
Palacio de Cristal de Arganzuela, un invernadero del siglo XIX
Otro de los enclaves más impactantes, que forma parte del conjunto arquitectónico de
Matadero, es el Invernadero del Palacio de Cristal de Arganzuela, con más de 7.000
metros cuadrados. Fue rehabilitado tomando como modelos los espacios de este tipo
situados en parques de ciudades europeas como Viena o Londres, representativos de
la Arquitectura del Hierro del siglo XIX.
Está distribuido en un escenario central y cuatro espacios cerrados que representan
microclimas diferentes. Dispone, además, de láminas de agua, fuentes, rías y acuarios
con peces de diferente hábitat.
Madrid Rio, lúdico y sostenible
Seguimos nuestro paseo asombroso por ese Madrid que es hoy, tan lejano del que fue.
Y nos vamos a la joya de la transformación urbanística: Madrid Río. Rescatado del
tráfico, tras el soterramiento de la autopista urbana que lo atravesaba, se ha
convertido en un enorme enclave lúdico y cultural paralelo al río Manzanares. Gracias
a su renaturalización representa, además, un auténtico corredor ecológico para
numerosas especies, permitiendo asegurar que Madrid también tiene playa, en alusión
al singular espacio formado por tres recintos acuáticos con chorros de agua, ideales
para refrescarse en verano.
Pasear por su entorno o recorrerlo en bicicleta, observando los puentes históricos
como el de Toledo y el de Segovia y los de nueva creación como el de Arganzuela, es
una experiencia única. ¿Quieres inmortalizar tu visita? Si es así, hazte una foto de
postal junto al conjunto escultórico formado por la palabra “Madrid” y el icónico Oso
abrazado al Madroño. Darás con él en la explanada del Puente del Rey, situada junto a
una de las entradas a la Casa de Campo.
Este es también un enclave perfecto para hacer una parada gastronómica en locales
como el Café del Río, con una terraza al aire libre y un mirador en su parte superior
desde el que disfrutar de espectaculares vistas al Palacio Real y la Catedral de La
Almudena.
La Fábrica más intelectual
Nuestra próxima parada es la antigua fábrica de cerveza “El Águila”, cuyo origen se
remonta a 1912 y supone un ejemplo del estilo neomudéjar caracterizado por el
ladrillo y los detalles de azulejo. Siguió teniendo una función industrial hasta los años
ochenta del pasado siglo y posteriormente fue rehabilitada para convertirla en un
conjunto arquitectónico y cultural conocido como El Águila. Entre los espacios que
alberga, figura la Biblioteca Regional Joaquín Leguina, destinada a la conservación del
patrimonio bibliográfico.
Museo del Ferrocarril, un viaje al siglo XIX
Locomotoras, vagones de viajeros, fotografías antiguas… El Museo del Ferrocarril,
situado en la antigua estación de Delicias, es un auténtico viaje en el tiempo. El
edificio, proyectado por el ingeniero francés Émile Cachelièvre, siguiendo los avances
europeos con los que se innovaba en el uso del hierro y del vidrio para la construcción,
fue todo un ejemplo de modernidad y de progreso para el Madrid del último tercio del
siglo XIX.
Apúntate también que el segundo fin de semana de cada mes, este espacio acoge el
Mercado de Motores, un rastillo donde encontrar moda de segunda mano, muebles
con diseños creativos o con sabor retro o joyas musicales en vinilo. Y, para reponer
fuerzas, brujulea por los puestos de comida.
Y no muy lejos, cerca de la estación de Atocha, encontrarás otra de las señas de
identidad gastronómica de Arganzuela: las tabernas tradicionales. Hablamos, en este
caso, de Bodegas Rosell, un local centenario que no tiene pérdida por los coloridos
azulejos de su fachada característicos de la decoración bodeguera madrileña. No dejes
de probar sus celebradas tortillas y croquetas.
Museo Banksy, el arte urbano más enigmático
Con la vocación de Arganzuela por transformarse en una zona en la que la cultura de
vanguardia es un vecino más, el museo del artista británico Banksy tenía que estar
aquí. En un antiguo garaje rehabilitado con una estética sorprendente, los admiradores
del enigmático creador tienen una cita con más de 170 piezas, incluidas
reproducciones a tamaño real de sus murales más icónicos como Girl with a
Balloon y The Flower Thrower.
Tras su aparición en los años 90 en la escena artística de Bristol, Banksy ha alcanzado
fama mundial gracias a sus obras provocativas y a menudo efímeras, realizadas en
muros y espacios públicos de ciudades alrededor del mundo, muchas de las cuales
tienes la oportunidad de conocer en Madrid.
Planetario, desde Madrid al Universo
Dicen que desde Madrid al cielo y nosotros añadimos que desde Arganzuela al
Universo. Es posible desde el Planetario, que se encuentra dentro del Parque Enrique
Tierno Galván. Todo un divertido plan con conciertos bajo las estrellas, exposiciones y
observaciones bajo la supervisión de expertos que nos permiten descubrir los secretos
del Universo. Cuenta, además, con una sala de proyecciones para disfrutar de distintas
propuestas visuales a cúpula completa y un sistema de vídeo para vivir experiencias
inmersivas.
Cultura, ocio, naturaleza y hasta astronomía. Arganzuela, ¡una histórica zona industrial
de Madrid que respira modernidad!
